jueves, 15 de abril de 2010

Lala, la cuchara.



Un acto para mi tan repulsivo como escupir, chuparse los dedos o eruptar. para los demás era tan importante como la reproducción de los bichos bolitas o el karma de los saltamontes crocantes de oriente.Pensarlo me llenaba de nervios la garganta,me presionaba el pecho y enmudecia mis siguientes 30 minutos.
Nunca entendi como ciertas personas tienen mayor sensibilidad a algunas cosas y otras pueden parecerles insignificantes por ejemplo mi aversión a algunos sonidos era tan profunda que tenia la increíble capacidad de modificar todo lo demás.
No creo que esto tenga que ver con mi infancia, tuve sonidos demasiado tranquilos,mucha voz de mamá diciendo te quiero y un hermano menor titubeando compulsivamente :LALA, LALA, LALA, LALA,LALA. Era como una canción carente de emociones, un tarareo hablado cuya finalidad era lograr mi atención.Claro, mi nombre con una R no era tan facil para un hermanito de 3 años con problemas fonoaudiologicos y consentido,mañoso y maricón. Cuando pienso en esos años donde el media menos de un metro lo recuerdo frente a una puerta de madera diciendole a mama “Lala cedo da pueta” (entiendase como “Tamara cerró la puerta”) seguido de un desgarrador llanto de abandono materno inexistente.En resumidas palabras ese era mi hermano:un llorón.
Perdi mas tarde toda conexión auditiva con el.No recuerdo en que momento aprendió mi nombre, aun habiendo solucionado su problemita de patin de R ya no lo usaba,creo que adopto nick´s mas modernos para referirse a mi:Boluda, tarada,estúpida.A mi me molestaba su mudez conversacional y calculo que a el mi verborragia.Mi hermano y yo…
Pero mi flashback es mucho mas reciente.
Hace unos dias, semanas o meses, o solo algunas horas, estabamos comiendo lo que en caso de estar sola hubiera sido un banquete apocaliptico,la gran cena , el manjare de los manjares.Pero no, estaba toda mi familia con su respectiva cuchara absorbiendo como oso hormiguero cada uno de los porotos en guiso en un concierto de inspiración bucal desafinado un ritual en el que cerraban los ojos, acercaban la cuchara y demoraban unos 4 segundos en aspirar el alimento y hacer limpieza de utensilio luego con una gran bocanada, pero curiosamente la bocana llegaba cuando el sonido se habia hecho tan eterno que retumbaba en mi cabeza luego del silencio. Me sentia una psicotica hecha y derecha. Mi hermano estaba ahí, dirigiendo la gran orquesta, poniendo aun mas énfasis en cada “llevarse a la boca”.De tanta sensibilidad en la percepción podia escuchar hasta ese guiso chocando contra las paredes de su esofago,no podia concentrarme en nada mas que odiar sentirme asi.
No recuerdo muy bien en que momento (porque mi psiquis es tan inteligente y conveniente que jamas recuerda los detalles que me llevan al epicentro del conflicto)
Comenzamos a pelear con el, con mi hermano.
Seguramente porque buscaba excusas para levantarme e irme del chiquero de cucharas, de mi desagrado a su manera de nutrirse con guisos, sopas, pucheros o todo lo que se comiera en plato hondo y con cuchara.
Lo persegui, como siempre,en un intento de humanizar mi maniatico y paranoico modo de ser, pero ya era tarde, ya tenia el titulo de loca, un postgrado de perversa y una maestria en victimizacion de primer nivel.Calculo que caminar balbuceando groserias detrás de alguien mientras va a su cuarto no es tan normal como yo lo veo.
Se sento de espaldas a mi olvidando mi existencia, y al presenciar tal desprecio,olvide tembien mi buena educación, mi bajo nivel de tolerancia y la poca razon que habia juntado de la cocina al cuarto. Que era lo que necesitaba? Imponer dominio?Miedo?
Mostrarme serena, inteligente y diplomatica?Si, tanto como Hannibal Lecter.Asi me veian ellos, mi familia.

Y yo sentada en la cama intentando hablar con mi hermano el mudo.

En una improvisación extraña de actor principiante se dio vuelta con cierta brutalidad y dijo “Con vos no se puede hablar”,Tenia razón, era verdad…conmigo jamás se podia hablar.Y mas flashback´s llegaron a mi, , de colores oscuros,de piel áspera y gusto a limón.Me recordé amenazante,manipuladora,perversa,perdida,despiadada y egoísta,descubri tambien que el no era mudo sino yo sorda..
Comence a llorar y no podia pensar en otra cosa que en una auto revelación profetica que habia tenido durante toda la mañana : “Comé en el cuarto, ya sabés que no soportas ese tipo de comidas en familia. Se lo conté a el en ese momento y el me abrazo y me siguió lacrimalmente balbucendo en tonos claros,seguros y mas adultos que los mios:
- Vos nunca vas a dejar de tener 14 años…
Los dos conmovidos, incomodos como todos los hermanos cuando se demuestran mucho afecto.

Yo pensé en que habria pasado por su memoria para llevarme a los 14 y no a los 12, a los 10 o los 21. Luego de cuantiosos calculos llegué a la conclusión de que a mis 14 el tenia 8 años,la edad justa en que empezo a llamarme por mi nombre,cuando de tanto “ppppprrrrr” y ruidito de auto con lengua aprendio finalmente las R y comenzo a hablar como un Sr.Niño.El inconsciente y la ingeniosa psicología humana siempre adelantada a la conciencia se habia anticipado a guardar en el lo mejor de mi.
Y yo entendi en otro lenguaje, entre mudo y fantasioso, entre inventado y percibido,
Que el me volvia a cantar sin gracia mi antiguo nombre: Lala.
Tampoco quiero darle demasiada importancia al caso, despues de todo la culpa fue de la cuchara.

2 comentarios:

  1. DISCULPA MI BREVEDAD PERO ME GUSTO MUCHO!

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  2. Nose como llegue aca, ni se si esta bien que comente en algo que es muy tuyo..
    pero imposibe no leer cada letra de esta pagina.
    Me hiciste emocionaaaar...
    sos una mina muy inteligente, lo mejor lejos de los lejos.
    te quiero ♥

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